Un incremento del 12% del área sembrada de arroz en todo el país en el primer semestre del 2020, registró la Encuesta Nacional de Arroz Mecanizado, adelantada por la Federación Nacional de Arroceros, en convenio con el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas -DANE, quien procesó los datos de dicho ejercicio.
Los resultados de la Encuesta que se realizó entre el 20 de mayo y el 30 de junio, recogió información de 5.500 fincas a lo largo de las 4 zonas productivas del país (Llanos Orientales-Centro-Caribe Húmedo y Caribe Seco), indican que en el primer semestre de este año, se sembraron 394.421 hectáreas de arroz, es decir 11,8% más que el mismo periodo del 2019, lo que significará una mayor producción de arroz en el país, hecho positivo en medio de la circunstancias creadas por la pandemia del Covid 19.
Los datos que reflejan con alta precisión lo que ocurre en el área arrocera nacional compuesta por 215 municipios, fueron obtenidos a través de entrevistas presenciales, o de imágenes satelitales ópticas y de radar, de acuerdo a la viabilidad en cada zona, teniendo en cuenta las restricciones y los lineamientos propios de las medidas especiales por la Pandemia.
Del total del área sembrada, cerca del 30% se cosechó entre los meses de mayo a julio, lo que significa que falta por recolectar un 70% del área que corresponde, principalmente a la de los Llanos Orientales. Es importante anotar que esta región que concentra el mayor porcentaje de siembras, tuvo un crecimiento del 12,6% con respecto al 2019, llegando a 236.092 hectáreas.
La Encuesta de Arroz Mecanizado, en relación con la cual el DANE y Fedearroz han dado a conocer estos resultados generales, hará una segunda publicación para entregar detalles por zona productora y otros correspondientes a los volúmenes de producción y los rendimientos que se obtuvieron de la cosecha de arroz del primer semestre de 2020 (siembras del segundo semestre 2019), en los cuatro principales departamentos productores del país (Meta, Casanare, Tolima y Huila).
En cuanto a la recolección de todas las siembras que se vienen dando en el segundo semestre 2020, es importante anotar que ello generará, como es habitual, una producción superior a la demanda normal del país en los meses que restan del año. Por ello, buena parte de la cosecha deberá almacenarse, para poder atender la demanda nacional en los primeros meses del 2021, cuando la recolección por sí sola no la cubre.
Esta dinámica que es propia de la estacionalidad de la cosecha en las regiones con mayor producción, establece como ha sido también habitual, la adopción de mecanismos como el incentivo al almacenamiento de arroz, con el fin de evitar las imperfecciones del mercado que afectan al agricultor por el descenso desproporcionado de los precios.
En virtud de tal situación se espera del gobierno nacional, la destinación de los recursos necesarios para el incentivo, lo cual es determinante para que se paguen precios justos a los productores, que son indispensables para la sostenibilidad económica del cultivo.
De darse tales presupuestos, se propende por la permanencia de la actividad arrocera que genera en la fase primaria, cerca de 400 mil empleos y que hoy tiene una incidencia mucho mayor en la seguridad alimentaria nacional, aspecto de la mayor relevancia en medio de las muy complejas circunstancias que se padecen por el Covid 19.
Los resultados de las siembras significan, que en medio de la histórica prueba que nos impuso la Pandemia, los productores arroceros le cumplieron al país y siguen firmes en su voluntad de seguirlo haciendo.