El año nuevo llegó con grandes expectativas para la cadena láctea del país y, en ese sentido, para las familias colombianas.
La tendencia mundial en el crecimiento del consumo de lácteos, — a la que se debe conectar Colombia —, la estabilización del mercado a finales del año pasado en el país y las garantías que suponen los programas del Fondo de Estabilización de Precios hacen prever un año de oportunidades para el sector.
Así lo aseguró Felipe Pinilla, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche de Colombia (Analac), para quien las cifras y proyecciones con las que cuenta la Asociación, a 20 días del 2025, demuestran que la inflación cedió y hacen prever el desmonte de barreras en el consumo de lácteos para la población colombiana.
En el país hay una leve recuperación en el gasto real de los hogares en lácteos, acorde con cifras del tercer trimestre de 2024 de la consultora Raddar. “Esperamos que este sea el punto de partida para que, con el trabajo del sector, la tendencia de consumo en Colombia se conecte con la tendencia creciente global”, aseguró Pinilla. En ese sentido, los esfuerzos de trabajo sectorial deben promover el consumo de lácteos en el país y explorar oportunidades en el mercado internacional que fortalezcan a toda la cadena y satisfagan a los consumidores.
“Hoy, con menos de 3 mil pesos, una familia colombiana puede adquirir una bolsa de leche de excelente calidad, pues las exigencias de Minsalud e Invima de buenas prácticas y de calidad son exactamente las mismas que para leches de más de 5 mil o 6 mil pesos. La diferencia de precios depende, en realidad, de si se trata de marcas blancas, de discounters o de marcas tradicionales en supermercados y grandes cadenas. En cada caso el modelo de negocio varía, por eso vemos un rango amplio de precios de la leche en el mercado”, explicó Felipe Pinilla.
En efecto, y acorde con los registros oficiales más recientes, el precio promedio de un litro de leche deslactosada en 2025 es de $4.936 pesos y de $5.001 pesos para la leche entera. El techo de esta última se ubica en $9.750 y el litro más barato se consigue en $2.917.
“Creemos que este amplio margen de precios seguirá generando oportunidades para los diferentes modelos de negocios existentes y mayor competencia en el mercado. Todo esto beneficia al consumidor final a quien seguiremos informando sobre cómo trabaja el sector para que tenga la certeza de que la calidad está garantizada independientemente del precio. Esto, a su vez, incentivará el consumo en este 2025”, dijo Pinilla.
Sobre ese punto, el dirigente gremial estimó que han sido claves las estrategias de estabilización de mercado, promoción de exportaciones y compras vía Bolsa Mercantil de Colombia que ha adelantado el sector con recursos del Fondo de Estabilización de Precios de Leche y Carne por más de 18 mil millones de pesos. “Arrancamos el 2025 con total normalidad en el acopio, estabilidad en el precio al productor, con grandes expectativas frente al programa de cultura exportadora y, quizá lo más importante, con buenas noticias para los consumidores con inflación que cede”, concluyó el presidente de Analac.