En un operativo conjunto entre la Policía y la Fiscalía 32 Seccional Yopal, se logró desmantelar una red dedicada a la falsificación y distribución de aceites lubricantes de baja calidad. Los involucrados adquirían aceite de baja calidad en otras partes del país, lo reenvasaban en tarros de marcas reconocidas y lo vendían a los consumidores locales, causando serios daños a los vehículos.

El Capitán Gómez de la Sijín, informó que los falsificadores utilizaban métodos sofisticados para engañar a los consumidores, colocaban dos estampillas en los tarros, una original y otra falsificada, utilizando herramientas como planchas y esferos calientes para sellar los envases; además, la estampilla falsa cubría toda la boquilla del tarro, a diferencia de las originales que solo se adhieren a una parte específica

Las autoridades incautaron más de seis toneladas de aceites lubricantes falsificados y materiales para reenvasar en cinco diligencias de allanamiento.

Según las investigaciones preliminares, los falsificadores obtenían ganancias de entre 400.000 y 600.000 pesos por cada caneca vendida. La fabricación de las estampillas falsas no correspondía con las fechas y lotes de los productos originales, un detalle que ayudó a detectar la falsificación.

Se reseñó que, por ejemplo, un usuario que necesita aceite con especificaciones técnicas de 20W-50 puede terminar usando aceite de cocina, lo cual es fatal para el motor y otros sistemas del vehículo.

El Capitán Gómez, informó que la investigación está en curso para determinar la procedencia exacta del aceite falsificado y la participación de los proveedores involucrados. Actualmente, se han identificado dos proveedores principales en Bogotá y Bucaramanga, pero no se descarta la existencia de más implicados. Las autoridades trabajan para establecer si la ilegalidad se origina en el punto de fabricación o si es responsabilidad de los distribuidores locales.