Artefactos que se encontraban enterrados en zonas boscosas y podrían haber afectado a más de un centenar de personas, entre habitantes del sector y miembros de la Fuerza Pública, fueron desactivados en los últimos días por el Ejército Nacional.
La Décima Sexta Brigada, localizó y destruyó de manera controlada 22 artefactos explosivos improvisados que se encontraban instalados en lo que serían los corredores de movilidad de la Subestructura 28, del grupo armado residual (GAO-r), hacia un área campamentaria desalojada por esta estructura criminal en la vereda Sinaí, municipio de Sácama.
Dos días después, desde otro punto de esta misma zona rural, los soldados identificaron otros tres artefactos explosivos que también fueron detonados de forma controlada y segura.
Los hallazgos se dieron en medio del desarrollo de operaciones ofensivas contra la Subestructura 28, y fueron destruidos controladamente por el Batallón de Ingenieros de Combate N° 18 General Rafael Navas Pardo.
Según el Ejército, este accionar de la subestructura 28 constituye una flagrante infracción al derecho internacional humanitario, ya que pone en riesgo la vida e integridad de la población civil. Con la detonación controlada de los artefactos explosivos, se neutraliza las capacidades delictivas de esta organización armada, contribuye a la tranquilidad de las comunidades y a su libre movilidad por áreas seguras.