El río Meta causó grandes inundaciones en la vereda El Limonal de Maní, en dónde los habitantes sufren una crisis humanitaria por la carencia de alimentos, agua potable y la aparición de brotes de enfermedades.

Según las familias damnificadas, no ha llegado ningún tipo de ayudas de la Alcaldía de Maní, ni de Gestión del Riesgo Departamental, versión que fue refutada por la administración municipal al afirmar que atendieron el llamado con ayudas humanitarias, “de hecho la vereda Limonal fue de las veredas priorizadas en las entregas, en total se entregaron 55 ayudas humanitarias”, señalaron.

Sin embargo, uno de los afectados sobre el particular reiteró que, “Esas fueron las ayudas que entregaron el día 22 de junio, una hamaca, una cobija y un toldillo. Lo demás es una remesa que sí se comparan su valor no supera los $80.000. Es lamentable ver como sacan pecho, si verdaderamente estuviesen preocupados por el bienestar de la comunidad estarían más pendientes especialmente de las familias que habitan en la ribera del río; y no sólo la vereda Limonal en iguales condiciones se encuentra Guamal, Garibay y el corregimiento La Poyata. Estamos con el agua al cuello hace más de 65 días”, señaló uno de los damnificados.

Para complicar aún más la situación, depredadores como grandes serpientes y caimanes aparecen con frecuencia en las viviendas, amenazando la integridad de sus moradores.

Son 18 familias las que atraviesan por una situación crítica, pero no han salido de las viviendas debido a que inescrupulosos están pendientes de su ausencia para hurtarles sus pertenencias. Algunas familias alcanzaron a improvisar tarimas artesanales y ahí duermen.

Aura Liliana Cruz Sandoval habitante del sector, afirmó que los cultivos de yuca, plátano, ahuyama, maíz, arroz, entre otros, fueron arrasados con la fuerza de las aguas, “perdimos la inversión y quedamos sin cultivos de pancoger pues no quedaron ni las semillas”, señaló.

Añadió que la situación se dificulta pues no hay formas de extraer agua para el consumo porque los pozos profundos colapsaron.

El Limonal está ubicado a cuatro horas del casco urbano de Maní, sus habitantes insisten en que se encuentran en absoluto abandono.

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