Producto de los cambios bruscos de temperatura que se registran en el país, la producción agropecuaria nacional sufre una serie de afectaciones que se reflejan en la calidad y cantidad de los productos.
El ICA recomendó a los productores aplicar acciones preventivas que les permitan afrontar este fenómeno y evitar un mayor impacto negativo en la producción agrícola y ganadera nacional.
En algunas zonas del país, las bajas temperaturas en la madrugada ocasionan daños irreversibles en todos los cultivos, pero los mecanismos y la tipología del daño varían considerablemente.
En las regiones del país donde se presentan intensas lluvias, se recomendó mantener la alerta sobre ataques de algunos hongos, debida al incremento progresivo de los contenidos de humedad del suelo, así como la recolección temprana de frutos, podas fitosanitarias y destrucción de residuos de cosecha.
Algunos cultivos frutales, hortícolas y ornamentales de origen tropical experimentan daños fisiológicos cuando están sometidos a temperaturas por debajo de los 3°C, grados centígrados (heladas). Los departamentos más afectados por las heladas que se presentan en horas de la madrugada son Cundinamarca, Boyacá, Nariño y en municipios que estén por encima de los 1500 metros sobre el nivel del mar.
Se alertó a los agricultores y ganaderos para que apliquen medidas preventivas que minimicen el impacto de estas condiciones climáticas en los cultivos y en la producción ganadera.
Los cultivos que pueden ser más afectados por las heladas son flores, maíz, papa y hortalizas como fríjol, arveja, cebolla, habichuela, repollo, zanahoria, remolacha, entre otras.
Así mismo, en otras regiones del país, se presentan altas temperaturas que debilitan las plantas, y cambian el contenido nutricional de la sabia, haciéndolas más atractivas para los insectos.
Estas condiciones de estrés fisiológico de las plantas les permiten a los insectos fitófagosun aumentar su capacidad reproductiva, su potencial de supervivencia y otros factores bióticos. Esto se traduce en una proliferación de artrópodos plaga como ácaros e insectos que se alimentan de tallos, hojas y frutos de pastos y una diversidad de cultivos, alterando el crecimiento, desarrollo y producción y en algunos casos causando muerte de las plantas.
Para hacer frente a las heladas que se presentan en las madrugadas en las regiones de clima frío El ICA recomendó, reducir actividades de laboreo para evitar la excesiva pérdida de agua por evaporación.
Sembrar en aquellos lotes en donde se facilite la aplicación de riego y, en lo posible, en donde no haya historial de heladas.
Realizar la adecuada fertilización para que las plantas estén menos susceptibles a las bajas temperaturas.
Instalar pequeñas fuentes de calor distribuidas en los lotes o invernaderos, sin olvidar las medidas de precaución para evitar posibles incendios.
Cubrir las plantas con coberturas plásticas. Humedecer el suelo antes de las heladas.
Consultar a un asistente técnico, a las Umata, secretarias de agricultura municipales y departamentales o a la oficina del ICA más cercana al predio.
Las medidas para reducir el impacto del intenso verano deben ser de corto, mediano y largo plazoInstalar sistemas de riego y de recirculación de agua o propiciar métodos de captura de aguas lluvias
Propender por una agricultura ecológica, ojalá en armonía con sistemas silvopastoriles; éstos proyectan sombra y evitan que la alta luminosidad de los rayos solares desequen rápidamente el suelo.
Utilizar abonos orgánicos y humus para recuperar las condiciones biológicas del suelo.
Emplear coberturas vivas o muertas para evitar la deshidratación del suelo.
Conservar ciertas malezas en las calles del cultivo. Éstas evitan que los rayos del sol causen mayor impacto en la tierra.
Emplear fuentes compuestas como fuente de Nitrógeno, evitar las fuentes simples.
Consultar a un asiste técnico, a las Umata, secretarías de agricultura municipales y departamentales o a la oficina del ICA más cercana al predio.
En producción ganadera Construir pequeños diques en depresiones y hondonadas para recoger las aguas lluvias.
Construir cambuches o cobertizos para el sombrío del ganado en sabanas o praderas muy descubiertas, que eviten la deshidratación y daño en la piel de los bovinos.
Propiciar la producción silvopastoril
Utilizar bloques multinutricionales.
Disminuir la carga animal por hectárea, haciendo una mejor redistribución de los animales por potrero.
Establecer planes de suplementación nutricional con subproductos como: licor o afrecho de cervecería, tallo o vástagos de plátano, melaza, residuos de cosechas como zanahoria, remolacha, papa, plátano, banano, yuca, pulpas y cáscaras de frutas, henos, tamos tratados con amoníaco o úrea, torta de palmiste y subproductos de la industria de la yuca.
Utilizar follajes de plantas arbóreas: por ejemplo acacia forrajera, botón de oro, sauco, “quiebra barrigo” o “nacedero” asociada a gramíneas, suplementando con una ración de forraje verde que corresponda al 12% del peso vivo del animal.