En un comunicado a la opinión pública la Asociación Colombiana de Ingenieros de Petróleos - Acipet sentó su posición referente al debate suscitado por el licenciamiento ambiental otorgado en la zona aledaña a la región de la Macarena.

Según Acipet, la polémica que ha generado el debate de la licencia ambiental en La Macarena otorgada por la Autoridad Nacional Ambiental, Anla, a la petrolera Hupecol, tiene a la opinión pública divida entre ambientalistas, academia, industria y Gobierno Nacional, como se observó en el debate de la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes, la semana pasada.

Al respecto Carlos Vargas, director del Doctorado en Geociencias de la Universidad Nacional, señaló que “el valor de la exploración en La Macarena no es solamente para buscar petróleo, sino de alto beneficio para el país”.

Vargas agregó que se deben tener en cuenta factores importantes frente a esta licencia, como que la exploración no es una actividad permanente sino transitoria, por tanto no se puede dar un concepto netamente negativo frente a lo que está aprobado; “hay que tener en cuenta que el Gobierno ha hecho unos esfuerzos importantes para que se traiga inversión al país, por tanto estoy seguro que la intención de entregar estas áreas jamás tuvo la pretensión de dañar el medio ambiente”. Acipet, que es una de las entidades que conforma la CIH, también comparte la postura de que es necesario reactivar la exploración.

Lo realmente preocupante de esta situación es el mensaje de inestabilidad jurídica que se transmite a la industria, según la Asociación Colombiana de Ingenieros de Petróleos.

“Es una falta de respeto para los posiblemente cientos de profesionales colombianos de múltiples disciplinas que durante cuatro años o más dedicaron sus esfuerzos y su conocimiento para encontrar un justo equilibrio entre lo solicitado y lo que se podía conceder con absoluta seguridad de no estar atentando contra el medio ambiente.

Por lo anterior, hacemos un llamado de atención e invitación para que el Estado y las instituciones competentes busquen la asesoría de la Comisión Interinstitucional de Hidrocarburos, CIH, y Acipet como cuerpo técnico consultivo del Gobierno Nacional frente a cómo aplicar y estructurar los temas de licencias.

De otro lado sometemos a consideración la posición de Hupecol, aclarando que el bloque no está ubicado dentro de ningún Parque Natural. El área que se puede intervenir se encuentra a 4 kilómetros de distancia de los límites del Parque Natural Tinigua”, y agregan en un comunicado que el proyecto “no coincide con la cuenca hidrográfica de Caño Cristales y está a 68 kilómetros” de este ecosistema. Sobre la cercanía con otras fuentes hidrográficas, la empresa dijo que la distancia es de 33 kilómetros con el río Guayabero y de 48 kilómetros con el río Duda”.

“El proyecto tiene cinco años de ser evaluado, desde el 2011 la empresa inició o hizo la solicitud para obtener licencia de exploración” explicó Fernando Iregui, director del Anla.

Vale la pena recordar, que en el mismo debate de la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes, Juan Carlos Rodríguez Esparza, Director Ejecutivo de Acipet, llamó la atención a todo el sector: Gobierno Nacional, empresas operadoras, de servicios y a la academia a reactivar la exploración para enfrentar la actual crisis, “consideramos que es imperante reactivar la exploración petrolera en el país, de lo contrario no vamos a tener producción en los próximos tres o cuatro años y vamos a estar abocados en los siguientes cinco años a tener que importar hidrocarburos a unos precios muy altos”.

No se puede echar por la borda un estudio profesional que se ha evaluado por expertos en materia ambiental y social durante cinco años, sin tener fundamentos técnicos por la contraparte, además en un debate donde no se conocen las conclusiones de estos expertos y que finalmente la Anla siendo la autoridad competente aprueba el licenciamiento de acuerdo a la normatividad vigente.