El Contralor Auxiliar para el Sistema General de Regalías, Leonardo Arbeláez Lamus , en el debate sobre Pacific Rubiales en la Comisión V de Senado, informó que la Contraloría ha realizado cuatro actuaciones referentes a Pacific Rubiales: dos procesos auditores y dos funciones de advertencia.
“Celebro la posición del Estado frente al caso de Quifa. Aquí se ven todos los actores del Gobierno en función de los intereses de Colombia”, manifestó el Contralor Auxiliar para el Sistema General de Regalías.
De estas actuaciones desarrolladas, la Contraloría también exaltó que se haya acogido la función de advertencia frente al cumplimiento del fallo sobre laudo arbitral entre Pacific Rubiales y Ecopetrol.
Esta función de advertencia le permite al Estado un beneficio directo de cerca de 13 millones de dólares por el fallo del Tribunal de Arbitramento del pasado 13 de marzo que respaldó la cláusula de precios altos, la cual actualmente se está cumpliendo pues Ecopetrol ya tiene el 45% de la producción del campo de Quifa.
A este respecto en el mismo debate de la Comisión V de Senado el Presidente de Ecopetrol, Javier Gutiérrez Pemberthy expresó: "Debido a la función de advertencia que recibimos por parte de la Contraloría de considerar la forma como habían evolucionado los precios en el tiempo, le hicimos conocer a Pacific Rubiales que debíamos tener en cuenta claramente esa variación, y que independientemente de hacer el pago en dinero o volumen se estableciera la equivalencia correspondiente para que se hiciera todo el reconocimiento completo".
Por otro lado, el Contralor Auxiliar de Regalías aseguró que el ente de Control Fiscal originó otra función de advertencia que busca alertar sobre la posibilidad de daños mecánicos en yacimientos que podrían afectar el factor de recobro de hidrocarburos en campos que están próximos a revertir al Estado.
Igualmente, sugirió buscar la forma de generar transferencia de tecnología y gestión de conocimiento a las entidades estatales frente a las nuevas aplicaciones que se están probando para aumentar la producción en yacimientos con crudos pesados. Esta información sería valiosa tanto en el sector ambiental como en el energético, y su propósito fundamental sería utilizar un lenguaje coherente y un sustento técnico que garantice la capacidad de las instituciones para realizar sus respectivas labores misionales.
El Ente de Control observó que en los procesos auditores que ha desarrollado a Pacific Rubiales, en el tema de fiscalización de crudos se están cumpliendo las prácticas normales en cuanto a la operación en este tipo de campos petroleros.
Sin embargo, la Contraloría encontró una debilidad en la presencia del Estado en los procesos de fiscalización, por ejemplo, la Agencia Nacional de Hidrocarburos tiene la autoridad de fiscalizar ¨In Situ¨ la producción de los crudos que le corresponden a la Nación, por lo que sugirió que valdría la pena saber o conocer que va a hacer la ANH para fortalecer esa presencia del estado en estos procesos.
En el tema ambiental, la Contraloría evidenció que hubo vertimiento de aguas industriales con incumplimiento de las normas vigentes que regulan la materia y no hay seguimiento estricto frente a los caudales aprobados por la Licencia Ambiental frente a los realmente vertidos por Campo Rubiales, atentando así contra el patrimonio ambiental de la Nación, por lo cual instó a las autoridades ambientales para ponerse al frente de este tema.
“Es importante empezar a construir una disciplina en el términos de cumplimiento ambiental frente a los vertimientos de residuos líquidos o industriales posteriores a los procesos de tratamiento que desarrollan las empresas”, puntualizó el Contralor Auxiliar para el Sistema General de Regalías, Leonardo Arbeláez Lamus.