Por Christian Rodrigo Pérez Gutiérrez*

Imposible tapar el sol con un dedo: la crisis por falta de agua potable y continua en Yopal permanece después de casi tres años de que se desplomara la antigua Planta de Tratamiento de Agua Potable por efecto de la naturaleza. Y es que ahora hay que hacer diferencia entre el desplome de la antigua planta y el desplome de la nueva planta.

En marzo del año pasado, producto de una protesta ciudadana, el gobierno municipal presentó como solución de mediano plazo la construcción de una Planta Modular de Tratamiento de Agua Potable, con un costo aproximado de 7.000 millones de pesos. El costo de esta alternativa superó los 10.000 millones de pesos debido a adiciones presupuestales realizadas.

El concepto de Modular se atribuía a su forma de construcción, lo que debía garantizar que su puesta en marcha tomara 3 o 4 meses. Es decir que a más tardar para agosto de 2013 el municipio de Yopal debía contar con una solución parcial o transitoria para el suministro continuo de agua potable.

Llegó diciembre de 2013 y ninguno de los anuncios de la entrada en operación de la Planta Modular se cumplían, empezaron los ruidos. Buena parte de la comunidad comentaba que la dichosa Planta Modular no funcionaría, que no tendría la capacidad de eliminar los altos niveles de turbiedad que se producen en la fuente abastecedora de agua por las lluvias. Sin embargo, la sorpresa fue otra: el día 21 de ese mes colapsó uno de los tanques que hace el proceso de floculación, incidente que dejó seis trabajadores heridos y alargó la espera de la ciudadanía por una solución.

El gerente interventor de la Empresa de Acueducto ordenó un peritaje a la Planta Modular, las conclusiones fueron aterradoras: “errores constructivos y errores en los diseños provocaron el colapso parcial de la Planta Modular.” El informe también señala que los demás tanques presentan riesgo de colapso y que se deben hacer refuerzos para garantizar que los tanques no se derrumben. Decepcionante que una obra de más de 10.000 millones de pesos haya sido mal diseñada y mal construida.

Por otra parte, como solución de corto plazo a la problemática, la Administración Municipal planteó la construcción de cuatro pozos profundos con capacidades de caudal entre 80 y 100 litros por segundo. Han perforado dos de ellos: en el primer pozo profundo -ubicado en el taller de obras públicas del municipio-, el contratante (Empresa de Acueducto de Yopal), contratista e interventor concluyeron que “las expectativas de caudal eran muy pobres”, dicho de otra manera, en ese punto no se encontró agua suficiente; en el segundo pozo profundo se obtuvo un caudal de 30 litros por segundo, cantidad bastante inferior al mínimo esperado.

La última solución planteada es la de largo plazo, se trata de un Sistema de Acueducto Principal cuyos estudios y diseños se contrataron en mayo de 2013 y que probablemente se entreguen en mayo del presente año. Si contamos los tiempos precontractuales y postcontractuales la obra difícilmente va a ser inaugurada antes del año 2018.

En definitiva, en Yopal continuaremos por lo menos tres años más sin agua potable. ¿Quién responderá por las malas decisiones tomadas? ¿Quién responderá por el impacto negativo sobre la salud? ¿Quién responderá por la pérdida de competitividad de los comerciantes causados por la ausencia de este derecho fundamental?

*Concejal, Ciudad de Yopal
@rodrigo_perez83