Por Leonardo Puentes*

Con un pie en el estribo la actual administración de Yopal, cuya cabeza está en proceso de notificarse del fallo que lo destituye e inhabilita para ocupar cargos públicos por 13 años, nos preparó un salpicón de impuestos de último minuto imposible de digerir.

Sacando partido de la oportunidad que le dio la aplicación de algunos beneficios que otorgó la reforma tributaria nacional de diciembre pasado, presentó un proyecto de acuerdo con los nuevos plazos y descuentos para contribuyentes morosos, pero aprovechó para de paso retomar el proyecto que aumenta el costo de los parqueaderos para vehículos inmovilizados, a solicitud de su recién estrenado concesionario; para introducir algunos micos de alcances insospechados y hacer malabares del más bajo oportunismo político:

1. REVIVIÓ EL PROYECTO DE ALZA EN LAS TARIFAS DE LOS PARQUEADEROS DE TRÁNSITO. Sin sonrojarse le puso a este salpicón tributario, que en principio era para aplicar beneficios, un ‘articulito’ que revivió el proyecto con el severo reajuste de precios que en diciembre fue retirado del Concejo por física vergüenza. Nadie se atrevió a sustentar este proyecto en solitario, a darse la pela en nombre de los nuevos dueños del negocio de los parqueaderos, que vinieron a solicitar aumento de tarifas porque, según argumenta el propio texto del acuerdo, la cosa no les está dando lo que esperaban.

Los aumentos autorizados el viernes pasado oscilan entre el 200% y el 600%! Quiere decir esto que al de por sí vergonzoso episodio de la concesión de los servicios de tránsito por 20 años, autorizada el 25 de diciembre de 2013 por nueve concejales de Yopal, que se reunieron mientras la mayoría de yopaleños compartíamos en algún río la celebración de la navidad con nuestras familias, se suma este reajuste de último minuto, para beneficio del afortunado particular que se quedó con la prestación del servicio por las próximas dos décadas. Ése sí que fue un gran regalo de navidad.

Con el mayor cinismo llegó a afirmarse durante el debate que la preocupación era la problemática de tránsito y que los castigados iban a ser los “malos ciudadanos” que infringen las normas. Por Dios!, quién puede creerle eso a la administración que se hizo elegir con la consigna de “NO MÁS persecución a los infractores” y dejó a Yopal sin Convenio de Policía de Tránsito por dos años, llevando las cifras de accidentalidad a convertirse en un problema de salud pública!

En síntesis, ahora que el servicio público de parqueadero para carros inmovilizados no se encuentra en manos del Estado sino de un particular, sí se aprueba un incremento de tarifas en proporciones hasta del 600%, todo para proteger los intereses del concesionario. Una muestra más de aquello a lo que quedamos expuestos con las leoninas concesiones que se atrevió a adelantar este gobierno.

2. De manera por lo menos llamativa se INTRODUJO LA FIGURA DEL AUTOAVALÚO DEL IMPUESTO PREDIAL; es decir, se abrió la puerta para que los contribuyentes yopaleños que “así lo deseen”, hagan su liquidación de impuesto predial por un mayor valor al que figura su predio en catastro.

Curioso. Después del malestar que causaron los aumentos hechos con la reforma al Estatuto de Rentas de 2012, ¿a quiénes puede interesar declarar y pagar mayores valores?. No soy experto en el tema, pero algunos entendidos nos alertan sobre la que podría ser la puerta para que muchos de los enriquecidos jeques de las urbanizaciones ilegales, beneficiarios del silencio cómplice de esta administración, evadan el pago de cuantiosísimos recursos por impuesto de ganancia ocasional.

Otra preocupación es que esta haya sido una fórmula fácil para introducir de manera camuflada una nueva alza al impuesto, a través de la presentación ‘voluntaria’ de un nuevo avalúo, mayor al de catastro, que a la larga se le pueda convertir a todos los contribuyentes en la obligación de ajustar el valor de sus predios, so pena de tener que asumir sanciones o los altos costos del impuesto de ganancia ocasional. Amanecerá y veremos cuál era la intención de ponerle esta cereza al salpicón.

3. Otro de los ingredientes fue la AUTORIZACIÓN PARA REGLAMENTAR EL COBRO DEL ESTACIONAMIENTO EN ZONAS AZULES, que aumentará de manera drástica al obedecer al cálculo del promedio de los cinco (5) parqueaderos privados más cercanos a la zona de parqueo autorizada incrementado en un 100%, es decir, multiplicado por dos. El alcalde queda igualmente facultado para incorporar las nuevas zonas que considere.

4. Y finalmente otro ingrediente llamativo fue la incorporación de la DECLARACIÓN Y LIQUIDACIÓN PRIVADA DEL IMPUESTO DE ALUMBRADO PÚLICO, cuyos alcances no están del todo claros, pero que pudieran guardar alguna relación con las eventualidades que pueda tener el recaudo futuro de este impuesto. Recordemos que esta administración pretende entregar por 25 años más la administración del alumbrado público a un particular.

Pero el mayor lance de oportunismo fue pretender que nos pasáramos tremendo salpicón con la tardía e improvisada propuesta de disminuir el cobro por Ocupación de Espacio Público en un 90%. Acompañé la proposición pensando en los comerciantes y solicité personalmente que se limitara a la ocupación con mesas, sillas y parasoles ya autorizados por el IDURY. Lo increíble es que apenas hoy, después de cuatro años, se estén acordando de sus promesas de campaña en 2011 y que, después de haber autorizado la mayor alza de impuestos al comercio de Yopal en toda su historia, salgan a posar de abanderados de los comerciantes.

El desmonte del calendario tributario y con él de los descuentos por pronto pago no prosperó. Fue una de las ‘concesiones’ de último minuto que nos hizo el gobierno a través de su mayor escudero en el Concejo. En ese sentido (ahí si social) se acabó la incertidumbre.

Agridulce salpicón tributario con cara de sapo, que no estuve dispuesto a tragarme.

*Concejal de Yopal.