Tras días de incertidumbre y protestas de usuarios y familiares, la Nueva EPS informó que llegó a un acuerdo con la Unidad Renal de Yopal para continuar prestando los servicios de hemodiálisis a los pacientes con enfermedades renales. El convenio asegura, al menos por ahora, la atención de 410 pacientes renales en el departamento de Casanare, quienes dependen de estos tratamientos para su supervivencia.
Alicia Galán, madre de una joven paciente, informó sobre la preocupación vivida en las últimas horas. "Esta mañana le dijeron a mi hija que sería su última hemodiálisis porque la EPS tenía una deuda con la Unidad Renal y no habían llegado a acuerdos. Fue un momento de angustia, ya que la vida de estos pacientes depende del tratamiento
La Unidad Renal había anunciado la suspensión del servicio debido a una "deuda grandísima" por parte de la Nueva EPS, lo que ponía en riesgo la continuidad de los tratamientos. Desde el viernes pasado, veedores de salud y familiares comenzaron a gestionar diálogos entre las partes, pero no fue sino hasta esta mañana, tras la presión mediática y un plantón convocado por los afectados, que se logró el acuerdo.
Según los familiares, el convenio alcanzado permitirá restablecer los servicios, aunque la Unidad Renal está a la espera de que la EPS cumpla los compromisos financieros pactados.
La Unidad Renal de Yopal es el único centro en el departamento que presta este servicio especializado. Pacientes de municipios como Maní, Trinidad, Paz de Ariporo y otros deben desplazarse hasta Yopal para recibir su tratamiento. Ante un eventual cierre del servicio, los riesgos para los pacientes serían críticos, ya que sus vidas dependen de las diálisis.
"Son pacientes con falla renal crónica, sus riñones no funcionan, y sin el tratamiento, la vida corre un riesgo inminente", alertaron los familiares.