Ayer se cumplió una nueva visita al proyecto de vivienda “Torres del Silencio” por parte del Comité de verificación creado por orden judicial, presidido por el Procurador Delegado ante el Tribunal Administrativo de Casanare, Alirio Calderón Perdomo y el abogado Jairo Libardo Preciado, en calidad de delegado de la Defensoría del pueblo regional Casanare, en la que se evidenció atrasos.

El abogado Preciado informó que “la obra se encuentra bastante atrasada debido a que no se cuenta sino con 35 trabajadores, cuando debiese tener al menos 100 personas contratadas para cumplir con el plazo dispuesto para la entrega de las soluciones habitacionales en el mes de octubre”.

Advirtió el funcionario de la Defensoría del Pueblo que de no entregarse los apartamentos en la fecha pactada, se adelantaría el incidente de desacato en contra de los responsables del proyecto de vivienda, entre ellos el Cogestor.

Aunque el proyecto tiene un avance del 90 por ciento de la obra, el Cogestor habría manifestado inconvenientes económicos para contratar más personal, a lo que se le suma que los precios que está manejando son los del inicio de la obra es decir de hace varios años.

El 10 por ciento faltante corresponde a los acabados de las torres y decorados de los apartamentos.

Así las cosas, aumenta la problemática para la finalización de la obra, agravada por la ocupación indebida por parte de beneficiarios, lo que obstruye aún más los trabajos, ya que el contratista debe hacer una entrega total cumpliendo con las condiciones de apartamentos nuevos y totalmente acabados.

Son en total 400 apartamentos, de los cuales ya 80 están ocupados, por lo que el Municipio deberá hacer el procedimiento de desalojo para garantizar las obras de finalización.

La Acción Popular cumple varios años de proceso jurídico presionando por la finalización del proyecto de vivienda.

Más líos

A la ya complicada situación de Torres del Silencio se suma también la denuncia de que la Sociedad Colombiana de Ingenieros habría suspendido recientemente la tarjeta profesional al cogestor Iader Barrios Hernández, lo cual le impediría ejercer su profesión.