Por Claudia Patiño Siachoque
Con la energía contagiosa de más de 500 niños, niñas y jóvenes reunidos en Nunchía se celebró el pasado sábado el segundo encuentro del programa Sembrando Joropo, iniciativa de identidad cultural y fortalecimiento de valores que apoya Equión desde hace varios años de la mano de la Fundación Cirpa que dirige Carlos ‘Cachi’ Ortegón.
Representando a instituciones educativas de los corregimientos de El Morro y Mata de Limón, así como a los municipios de Tauramena, Támara y el propio anfitrión, el evento de integración resultó todo un espacio de intercambio de experiencias en el que los estudiantes demostraron su nivel de desarrollo instrumental, vocal y dancístico.
Justamente la calidad interpretativa de los jóvenes beneficiarios evidenció como las enseñanzas de Sembrando Joropo las han apropiado. Es claro que para muchos de ellos ha sido esta una oportunidad única de formación, y a través de la cultura encontraron un espacio en la sociedad, descubriendo talentos que en muchos casos no conocían antes.
Para María Victoria Riaño, presidente de Equión y asistente en primera fila, la muestra folclórica demostró el compromiso de cada uno de los participantes, docentes y padres de familia, ratificando las bondades de tener continuidad y dedicación a lo largo del año escolar con el que está sincronizada la iniciativa cultural.
El apoyo de Equión a la identidad casanareña también se hizo presente en el tradicional Garcero del Llano, al que la compañía entregó instrumentos destinados a las instituciones educativas ganadoras.