Una serie de situaciones producto del mal comportamiento de la comunidad, están llevando al límite la capacidad del sistema salud, concretamente en el área de cuidados intensivos, según la Gobernación de Casanare.
Un informe entregado por el equipo del Gobierno seccional integrado para hacer frente a la pandemia del coronavirus, afirmó que el incremento de los accidentes de tránsito, riñas callejeras, entre otros incidentes, dispararon la demanda de camas UCI.
En una transmisión facilitada por los medios de comunicación regionales, se entregaron cifras que generan preocupación en las autoridades departamentales.
Se hicieron precisiones en tres sectores específicos, en los cuales ha venido trabajando la administración. El primero fue el de orden público, donde se recalcó que durante el año pasado se expidieron 17 decretos para reglamentar este tema, así como el comportamiento ciudadano.
Se aclaró que siempre se estuvo dentro del marco de la ley. No obstante recalcó que cualquier disposición del Gobierno resulta inocua, si la comunidad no toma conciencia y aplica las medidas de autocuidado recomendadas por las autoridades.
El segundo tema sobre el cual se hizo referencia, fue el incremento de las UCI en el departamento. Se indicó que al inicio de la pandemia se contaba con 30 de estas unidades y hoy Casanare tiene habilitadas 119, las cuales presentan una ocupación del 67 por ciento. “Es el único departamento que triplicó la capacidad de UCI en el país”, según el secretario privado y gobernador encargado, Álvaro Mariño.
Como tercer ítem se trajo a colación el plan de reactivación económica diseñado por la Administración seccional, subrayando que este esfuerzo debe ir de la mano con los protocolos de seguridad y el autocuidado.
Se hizo hincapié que pese a que Casanare se encuentra por debajo de las cifras proyectadas por el Instituto Nacional de Salud para el departamento, ya se han presentado 186 fallecidos por coronavirus y más de 9 mil contagiados.
A su turno Gobierno Departamental sostuvo que durante los primeros 6 días de enero se han atendido 92 riñas, algunas de las cuales han terminado en agresiones con armas de fuego o con elementos corto punzantes.
Es por ello que para el puente del 11 de enero, se tiene previsto un plan de trabajo con la Policía y el Ejército en 10 municipios, para tratar de disminuir este tipo de hechos.
En cuanto a una posible imposición de ley seca y toque de queda o cualquier otra medida restrictiva, deben ser consultadas con el Ministerio del Interior, dependencia del Gobierno nacional con la cual ya se han sostenido reuniones previas.
De todas formas cualquier decisión está sujeta al nivel de ocupación de las camas UCI y este dato lo suministra el Ministerio de Salud. Sin embargo se recordó que los alcaldes tienen abierta la posibilidad para imponer el pico y cédula en sus jurisdicciones.
Jenny Fernanda Díaz Barinas, secretaria de salud, invitó a la comunidad para que desista de lo que calificó como una falsa tranquilidad, durante las celebraciones familiares, ya que estos escenarios han contribuido activamente en el aumento de los contagios.
También invitó a los propietarios de locales comerciales para que controlen el aforo de sus establecimientos, para evitar aglomeraciones.
Igualmente recomendó abstenerse de los paseos de olla. Acotó que es más fácil controlar el contagio en las piscinas, por el cloro que contiene estos lugares de aguas estancadas, que en los ríos donde hay mayor exposición a todo tipo de impurezas que trae la corriente.
Entre tanto la gerente de Capresoca, Nuria Yarley Bohórquez Peña, sostuvo que todos los departamentos tienen cerradas todos sus UCI, por lo que en este momento es casi imposible conseguir una remisión a un hospital de tercer nivel.
“Hay un colapso en la red de salud del orden nacional y ni Capresoca ni ninguna EPS tienen la culpa. Se tienen pacientes con 23 y hasta 27 días esperando una remisión”, subrayó Bohórquez Peña, quien también hizo un llamado a la conciencia social, para que la ciudadanía continúe aplicando las medidas de autocuidado.
Para Red Salud, son varios desafíos lo que afronta la entidad, comenzando por la falta de profesionales. Hay déficit de 12 médicos en este momento en el departamento y no se han conseguido hojas de vida para suplir estas vacantes, pese a la difusión que se ha hecho, especialmente por redes sociales.
Sin embargo pese a esta situación no se ha dejado de prestar los servicios, en los municipios que tiene a cargo Red Salud.
En este momento hay 540 pacientes Covid, que se encuentran en etapa de aislamiento, en sus respectivos hogares. “Si el 5 por ciento de estas personas presenta algún tipo de complicación, colapsa la red de salud en el departamento.
Finalmente el director del pabellón de Covid en Hospital Regional de la Orinoquia, Hernán Darío Hernández Santacoloma, llamó la atención sobre los partidos de fútbol aficionado, muy populares durante los fines de semana.
Señaló que durante el llamado tercer tiempo, los jugadores y acompañantes suelen compartir ingiriendo generalmente bebidas embriagantes, dejando de lado el uso del tapabocas, el distanciamiento social y otras medidas de autocuidado, por lo que este tipo de escenarios se convierten en un factor de riesgo para la propagación del coronavirus.