Como muestra del avance sólido del gobierno de César Ortiz Zorro hacia la atención integral de la población migrante, refugiada y retornada, se llevó a cabo la 7.ª sesión de la Mesa de Coordinación de Asuntos Migratorios del departamento de Casanare. Este espacio estratégico se ha consolidado como el principal escenario de diálogo, planificación y coordinación de políticas migratorias en el territorio.
La jornada, realizada en la Fundación Amanecer de Yopal, fue instalada por el coronel (r) Edgar Ricardo Bernal Martínez, director Técnico de Convivencia y Seguridad Ciudadana, quien siguiendo los lineamientos del secretario de Gobierno, Julio Ramos Prieto ha liderado el fortalecimiento de esta instancia desde un enfoque de seguridad humana, inclusión social y corresponsabilidad institucional.
“Estamos consolidando una política migratoria departamental sólida, articulada y con rostro humano. La Mesa de Coordinación es hoy un referente nacional gracias al compromiso interinstitucional y al enfoque de corresponsabilidad que venimos promoviendo en cada rincón del departamento”, señaló Bernal Martínez durante su intervención.
Durante la sesión se presentaron avances en la construcción del Plan de Acción para la Gestión de la Población Migrante (PAPPM) y en el diseño del proyecto de decreto departamental que busca institucionalizar la Mesa como un instrumento permanente de política pública. Estas herramientas están alineadas con el Plan de Desarrollo 2024–2027 “Oportunidades para Casanare”, impulsado por el gobernador César Ortiz Zorro, quien ha promovido una gobernanza migratoria centrada en la inclusión, los derechos humanos y el desarrollo territorial.
Casanare está demostrando que la gestión migratoria se construye desde lo local, con enfoque diferencial y diálogo permanente. “Estamos sentando las bases de una política pública estructurada, inclusiva y sostenible”, ha expresado el gobernador en relación con el tema migratorio a nivel regional.
La jornada contó con el acompañamiento técnico de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), así como con la participación de entidades como Migración Colombia, el Ministerio del Interior, la Defensoría del Pueblo, alcaldías municipales, organizaciones de la sociedad civil y cooperantes internacionales.
El PAPPM, actualmente en su fase final de validación, define líneas estratégicas para la atención integral de la población migrante. Entre sus objetivos se destacan: el fortalecimiento institucional, el desarrollo de rutas integrales de atención, la generación de datos confiables para la toma de decisiones, la prevención de la xenofobia y la discriminación, y la promoción de la integración socioeconómica y cultural en municipios como Yopal, Aguazul, Paz de Ariporo, Villanueva y Monterrey.
También fue aprobado el cronograma de actividades para el segundo semestre de 2025, que contempla jornadas de formación en normativa migratoria, eventos de integración comunitaria y capacitaciones para funcionarios públicos y actores sociales, con el respaldo técnico de Migración Colombia, bajo el liderazgo de Álvaro Rugeles Castro.
“Este ejercicio de coordinación interinstitucional fortalece nuestras capacidades locales y nos permite avanzar hacia una migración segura, ordenada y con pleno respeto por los derechos humanos”, destacó Rugeles Castro.
La Gobernación de Casanare reiteró su compromiso con una gestión migratoria alineada con los marcos normativos nacionales e internacionales, incluyendo la Ley 2136 de 2021, el Estatuto Temporal de Protección para Migrantes Venezolanos (ETPV) y el Pacto Mundial para la Migración de la ONU.
Es de resaltar que, según datos de Migración Colombia con corte a agosto de 2024, en Casanare se registraron aproximadamente 26.393 migrantes venezolanos, lo que representaba el 0,94 % del total de migrantes venezolanos en Colombia. De estos, se estima que alrededor del 50,34 % residían en Yopal, es decir, aproximadamente 13.286 personas de origen venezolano.
Finalmente, durante el evento se hizo un llamado a construir una nueva narrativa migratoria que reconozca el valor, la dignidad y el potencial transformador de las personas migrantes en la construcción de un Casanare más humano, incluyente y con oportunidades para todos.