Alias ´Cuarto de Pollo, el Enano o Miller’, fue condenado en el juzgado Penal del Circuito de Yopal por el delito de desaparición forzada
El exjefe paramilitar, Juan Carlos Alfonso Zubieta conocido como ´Cuarto de Pollo, el Enano o Miller’, fue condenado en calidad de coautor el pasado 16 de marzo de 2022 por el juzgado Penal del Circuito de Yopal, por la desaparición forzada y el asesinato de cinco personas al sur de Casanare.
Según la investigación, el 15 de agosto del 2003, cuando las víctimas de desplazaban en una combinada y un doble troque para desarrollar trabajos agrícolas por orden de su empleador, el señor Carlos González, desde Paratebueno, municipio de Cundinamarca ubicado en el piedemonte llanero hacia Trinidad, fueron interceptados por las Autodefensas Campesinas del Casanare.
Oscar Palomino de 18 años, Carlos Castillo de 24, Luis Castillo de 28 años, James Holguín de 42 y Carlos Suárez de 55 años, se detuvieron a desayunar cerca al municipio de Monterrey, donde por orden del sindicado responsable del delito de desaparición forzada, los cinco hombres fueron conducidos al puente del río Tacuyá y llevados al comandante de las AUC de la zona, según indican testimonios de paramilitares.
Alfonso Zubieta, los detuvo durante dos semanas aproximadamente. Presuntamente en ese tiempo las víctimas fueron torturadas y asesinadas.
El Comandante de la Estación de Policía de Monterrey para la época, sargento segundo William Castillo, fue condenado en el 2012 en el mismo proceso, por ser un agente determinador en la desaparición forzada de estas cinco personas.
El paramilitar Juan Carlos Alfonso Zubieta, se encuentra gozando del beneficio de la libertad, por lo que organizaciones de derechos humanos solicitaron al Estado colombiano adoptar todas las medidas necesarias para garantizar la captura del paramilitar y encontrar a los cuerpos de las personas desaparecidas.
Por orden de HK
Según el Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo, en los alegatos de conclusión la fiscalía refirió que los hechos: “…tuvieron génesis dentro de la disputa territorial que tenían como protagonistas a las Autodefensas Campesinas De Casanare en cabeza del señor Héctor Buitrago Rodríguez alias el Patrón o Barrigas y las Autodefensas de Córdoba y Urabá en cabeza de los hermanos Fidel y Vicente Castaño, quienes a través de la violencia desmedida por medio de las armas, procuraban, unos mantener el dominio del territorio y los otros hacerse al mismo, vinculando en esta disputa a muchos inocentes ya que toda persona que se desplazara entre la ciudad de Villavicencio a El Yopal, era víctima del asedio por parte de quienes dominaban el territorio, tildándolos de ser integrantes de uno u otro bando, muchas veces basados en señalamientos a priori y otros fruto de las labores criminales de las mismas, lo que conllevó a una escalada de delitos en contra de muchas personas que no hacían parte de esa guerra”.
Aunque varios integrantes de las Autodefensas Campesinas del Casanare han sido condenados por estos hechos y han revelado detalles sobre los mismos, hasta la fecha se desconoce el lugar donde puedan estar inhumadas las víctimas.
En la investigación penal a cargo de la Unidad Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos, en julio de 2016, la fiscalía escuchó en diligencia de declaración al señor Wilmer Santiago Cutiva, integrante de las Autodefensas Campesinas del Casanare para la fecha de los hechos, quien afirmó que él junto a otros paramilitares se encontraban en un sitio donde otros miembros de la organización armada les llevaban a varias víctimas para asesinar. Con relación a los hechos de Monterrey, indicó que recibieron a las víctimas, las tuvieron por un lapso de dos o tres días y luego las ejecutaron con arma blanca por orden de HK. Los cuerpos fueron enterrados en una sola fosa.
Al confesar estos hechos, la Fiscalía lo vinculó al proceso mediante indagatoria y ante el interés de acogerse a sentencia anticipada, el despacho efectuó acta de formulación de cargos.
Además de la aceptación de su responsabilidad, el señor Cutiva, también conocido como Alias “Tolima”, expresó su deseo de colaborar y entregar los cuerpos de las víctimas desaparecidas, indicando que se encontraban en inmediaciones de Tauramena, y las víctimas solicitaron a la Fiscalía adelantar las labores pertinentes para realizar la diligencia de prospección y exhumación en el lugar indicado, pese a lo cual los cuerpos no fueron hallados.
El caso de estos cinco campesinos hace parte del flagelo de la desaparición forzada en el departamento del Casanare considerado uno de los departamentos más afectados con esta problemática de la desaparición forzada.
Entre el año 2000 y 2003 el Departamento del Casanare se vio azotado por cientos de desapariciones forzadas y ejecuciones sumarias perpetrados por el grupo Paramilitar autodenominado Autodefensas Campesinas del Casanare. Decenas de campesinos, agricultores, trabajadores, y habitantes de pueblos – hombres y mujeres – fueron sacados de sus casas, interceptados en los caminos o citados a comparecer ante los comandantes de esos grupos, en sus campamentos de donde no han regresado.
Según cifras de la Red Nacional de Información -RNI- de la Unidad para las Víctimas, ha dejado 4.129 víctimas entre 1985 y 2019. Yopal es el municipio con más las mayores cifras con 843 casos, seguido de Aguazul, 781 casos, Monterrey, 493 casos, y Villanueva, 454 casos.