Carmenza Erazo denunció que el pasado viernes 22 de abril hacia las 7:00 de la noche, en inmediaciones del coliseo Bicentenario de Yopal le raparon su teléfono celular.
Tras el hurto, realizó el seguimiento a través de una aplicación y logró ubicarlo en un establecimiento comercial, que justamente había sido sellado porque al parecer había comprado ese tipo de artefactos hurtados.
Dijo que su celular es un LG K61, que aparecía según el GPS en un local de la calle octava entre carreras 21 y 22 de Yopal. Al dirigirse a la zona encontró un almacén de venta de tecnología de móviles, por lo que solicitó el acompañamiento de la Policía, adelantaron el procedimiento correspondiente, encontrándose con la sorpresa que por otra denuncia el sitio había sido sellado por las autoridades, por lo que no pudo verificar que su dispositivo estuviera dentro.
Carmenza denunció que ayer regresó, pero el negocio lo habían abierto, según ella de forma irregular y habrían sacado el equipo pues en la aplicación ya no aparecía en esa dirección.
Erazo se acercó a la Policía donde la sugerencia fue interponer la denuncia por internet.
“Dudo del procedimiento de sellamiento, pues la propietaria durante el día ingresó varias veces, y en una de esas pudo haber retirado el teléfono que está avaluado en 840 mil pesos”, afirmó la afectada.