El marco de la estrategia nacional contra el secuestro y la extorsión, el Gaula de la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación y el Gaula Militar, desarticularon un grupo delincuencial denominado "Los Contratistas", dedicados al cobro de extorsiones mediante la modalidad de "Falso Servicio".
Gracias a las acciones investigativas y a las denuncias presentadas por 8 de sus más de 30 víctimas; las autoridades lograron identificar a seis personas, entre ellas 4 mujeres y dos hombres dedicados al cobro y retiro de dinero, producto de las llamadas extorsivas realizadas en medio de esta modalidad.
Luego de presentar los elementos materiales probatorios y evidencias físicas ante las autoridades judiciales, se emitieron las órdenes de captura por los delitos de concierto para delinquir y extorsión agravada, las cuales se hicieron efectivas en Bogotá, Chía, Cúcuta y Charalá.
Estas personas llevaban cerca de 3 años delinquiendo, especialmente a través del “Falso Servicio”, en donde apoyados por reclusos de diferentes cárceles del país, contactaban a las víctimas vía telefónica para un servicio de transporte, topografía, construcción, entre otros, haciéndolos desplazar a zonas rurales como la vereda la Argentina y Barcelona.
Estando allí, los llamaban nuevamente haciéndose pasar por un grupo armado ilegal, diciendo que se encontraban en territorio prohibido y que a partir del momento estaban secuestrados.
Una vez obtenían información personal, laboral y familiar, obligaban a las víctimas a apagar el celular para poder contactar a los familiares y propietarios de las empresas o vehículos y exigirles entre $2 y hasta $30 millones a cambio de no atentar contra sus vidas o no incinerar los vehículos.
Durante las comunicaciones que duraban entre 4 y 7 horas, los delincuentes realizaban conferencias vía telefónica entre los “Secuestrados” y sus familiares, logrando engañar aún más a sus víctimas.
Estas personas lograron recaudar más de $50 millones producto de sus actuaciones delictivas, victimizando a transportadores, ingenieros, topógrafos y comerciantes de Villavicencio, Acacías y otros sectores del país
Por otra parte, y en atención a este tipo de casos de extorsión, se adelantó un contundente operativo en la cárcel de Villavicencio para mitigar la extorsión y otros delitos como el tráfico de estupefacientes.
Desde allí se realizaban llamadas extorsivas y fueron hallados varios cuadernos con libretos de las diferentes modalidades de extorsión a comerciantes, empresarios y diferentes gremios de la región.
Durante el procedimiento apoyado por el INPEC fueron incautados 34 celulares, 80 Sim Card y más de 300 dosis de estupefacientes.