Por Arcadio Benítez Ortiz

Las reglas de juego de la democracia electoral definieron quienes estarán en el parlamento colombiano. A todos los elegidos el pueblo les entrego una gran responsabilidad: legislar para bien del pueblo. A nuestros parlamentarios Camilo, José Rodolfo y Jorge, mis felicitaciones.

Quiero detenerme en el senador Uribe. Respeto a todos mis conciudadanos que votaron por él. Ahora me pregunto seria que pensaron que puede hacer Uribe en el legislativo para bien del pueblo? ya lo conocemos, pues estuvo como presidente del país durante ocho años, con todo a su favor para gobernar: Congreso mayoritario y toda la institucionalidad nacional en sus manos. Fueron 8 fatídicos anos donde los índices de pobreza aumentaron, las reformas que propuso en campana tampoco las adelanto, los vicios politiqueros y la corrupción desbordaron todo limite.

El país vio como este hombre con su política de confianza inversionista entregaba las riquezas nacionales a las compañías multinacionales y sin ningún calculo social le abría el mercado nacional al mercado internacional que arruino de tajo la producción nacional; su política de enriquecer a unos pocos dio resultados.

Vendió a precio de huevo las empresas del estado, , ajusto el mercado laboral a los intereses de los empresarios, eliminando todos aquellos derechos que la clase trabajadora tenia… en fin… pero además, todo mundo sabe de sus andanzas en ese oscuro mundo de los traquetos y mafiosos, parece que ya olvidaron al traqueto Job que entraba a la casa de gobierno y que en su jerga la bautizo la « Casa de Nari » ,et, etc. entonces, ahora como senador que nos ira a proponer?.

Muchos de sus fanáticos seguidores dicen que esto hasta ahora comienza? Han olvidado que estuvo allí donde podía hacer las reformas que le convenía al pueblo colombiano y no las hizo.

Entonces, que no nos venga con su verborrea de culebrero, a tratar de cambiar el país desde el senado cuando no fue capaz de hacerlo desde la presidencia.

Espero no equivocarme en la siguiente apreciación, o mejor equivocarme para bien del país, este hombre se hizo elegir primero para satisfacer sus ansias de poder y segundo para oponerse ciegamente a una salida negociada al conflicto colombiano, porque sabe que si los diálogos de paz en la Habana logran ponerle fin al conflicto armado, él y su círculo más cercano desaparece del panorama político nacional.