Por Christian Rodrigo Pérez Gutiérrez
Pasó el 24 de diciembre y gobierno Celemín no entregó el regalo que prometió, Agua Potable 24 horas continuas en el primer año. En cambio si entregó más impuestos y un endeudamiento por 34 mil millones de pesos cuyos intereses se pagaran con los recursos que aportamos ciudadanos, NO es broma de inocentes, deberemos pagar 16 mil millones de pesos en intereses.
Pero en materia política y de planificación hay otras preocupaciones, NO es broma de inocentes, a las que me quiero referir. Actualmente hace curso en la corporación concejo de Yopal un proyecto de acuerdo que de aprobarse permitiría incorporar 43 hectáreas del suelo rural al suelo urbano, junto a un artículo que permitiría que el municipio comprara esta nueva área urbana con la excusa de destinarla a Vivienda de Interés Social y Prioritaria. Las preocupaciones son las siguientes:
1. De aprobarse así, gobierno Celemín incurre en un detrimento patrimonial, pues compraría suelos urbanos con la posibilidad de haberlos comprado como suelos rurales. Es decir va a pagar un mayor precio por unas tierras cuando puede pagar menos por ellas. Despiste?
2. Discurso politiquero, irrespetuoso e incendiario contra quienes hemos advertido del detrimento patrimonial y contra quienes hemos mostrado alternativas distintas. Han dicho que no hay motivos para votar negativamente y que somos enemigos de la vivienda para las personas de menos recursos.
Si se incorporan esos predios rurales a suelo urbano, se condena a la gente más humilde a vivir en la marginalidad, con costos sociales como: dificultad para llegar a un centro de salud u hospitalario, dificultad de niños y jóvenes para llegar a colegios y dificultad de ciudadanos para llegar a sus sitos de trabajo.
La alternativa que propondré en el debate de plenaria es que en lugar de condenar a vivir en la marginalidad a los más pobres, se compren predios urbanos y en estos se desarrollen viviendas de interés social o vivienda de interés prioritario. Si bien el precio de la tierra urbana tiene un mayor precio, la administración ahorra dinero al evitar invertir en redes de acueducto, alcantarillado sanitario, alcantarillado pluvial, gas, energía eléctrica, apertura y pavimentación de vías.
Si construimos vivienda de interés social y prioritario dentro de suelo urbano, lograremos que los ciudadanos de menores recursos hagan parte de una sociedad sin exclusiones, empezaríamos a recortar verdaderamente la brecha entre pobres y ricos. Si incorporamos a los más pobres al sector urbano si habría una verdadera Política con Sentido Social.
Christian Rodrigo Pérez Gutiérrez - Concejal – Yopal Casanare - M.Sc. Economia - @rodrigo_perez83