Los proveedores de la Unión Temporal de restaurantes escolares realizaron ayer una protesta frente a las instalaciones de la Secretaria de Educación Departamental exigiendo el pago de dineros adeudados.

Algunos proveedores se declararon quebrados pues les deben sumas que superan los 200 millones.

El Contratista Friedman Meneses, culpó a la Secretaria de Educación de la demora en el trámite del pago de la liquidación del contrato. "Esos contratos son un programa social de la Gobernación, sin embargo no les colocan el suficiente cuidado y las deudas ascienden a más de 2.000 millones de pesos", afirmó.

Sin embargo la Secretaria de Educación Jackeline Martínez, señaló que los contratistas no han entregado todos los soportes necesarios para poder legalizar el trámite del pago.

En internados por ejemplo terminó el convenio en septiembre del año pasado sin embargo el contratista entregó el informe sólo hasta el mes de diciembre.

Sobre el pago de 40 días de restaurante escolar del año anterior el contratista tampoco ha entregado su informe.

Sobre el convenio con Comfacasanare, señaló que continúa en problemas con la Procuraduría por lo que se debe manejar con mucho cuidado, ya que fue el motivo por el cual fue destituido el pasado Gobernador.