El piloto, Sebastián Ceballos y el técnico de telecomunicaciones, Freddy Alejandro Murillo Pacheco, los dos oriundos de Yopal, hacen parte de las víctimas fatales del accidente aéreo, donde la aeronave tipo CESSNA C182 de matrícula HK1464 de la empresa Arall, procedente de Mitú, se siniestró en inmediaciones de la población de Piracuara, departamento de Vaupés.
El piloto nacido en Yopal es sobrino del empresario de las confecciones Luis Niño, quién junto a otros familiares viajaron a Mitú con el fin de hacer las gestiones y proceder al traslado a esta ciudad de sus despojos mortales.
Entre tanto, Freddy Alejandro Murillo Pacheco, pertenecía a una reconocida familia de Yopal y este 19 de mayo cumpliría sus 28 años, estudio en el colegio Braulio González, se formó como tecnólogo en electricidad industrial del Sena en Yopal y desde hace cinco años trabajaba para una empresa contratista de Claro Colombia en el mantenimiento de las torres de telefonía.
Fredy Alejandro se había radicado hace ocho meses en Villavicencio desde donde se desplazaba a toda la región amazónica en dicha labor.
El día lunes 16 de mayo en horas de la tarde se encontraba en el poblado Piracuara Vaupés en la frontera con Brasil haciendo mantenimiento y reparación de una torre de telecomunicaciones junto a un compañero de la misma empresa, en uno de esos lugares donde solo es posible acceder en aeronaves que prestan el servicio a los departamentos de Amazonas, Vaupés, Guaviare y Guanía, y cuándo regresaban, al parecer por mal tiempo, el piloto perdió el control de la aeronave y a 2 kilómetros de la pista sucedió el lamentable siniestro.
La familia continúa a la espera de la información de las autoridades encargadas de las investigaciones y del traslado de los restos mortales a su lugar de origen.
“Yopal pierde a uno de sus hijos quien entregó su vida trabajando para mantener comunicado a los lugares más apartados de la geografía Colombiana”, indicó uno de sus familiares, que lo describió como un joven trabajador, entusiasta, amable, noble, colaborador y soñador, además de su profesión le apasionaba la mecánica, la conducción de camperos y las motocicletas.