
Por Oscar Medina Gómez
Me de fastidio, pereza y bronca  tener que volver  a escribir  sobre Rofer  Roncancio, Director de Tránsito de Yopal. No solo por la caótica  y peligrosa movilidad vial, sino por cuenta de otros temas.
Empiezo por el más reciente embrollo en que anda metido: la adjudicación de 77 nuevos cupos de taxis  para la ciudad. Proceso  que  no ha estado exento  de dudas, suspicacia, recelos.
Luego de que decenas de taxistas protestaran ruidosamente frente a la  alcaldía, alegando  que don Rofer no fue suficientemente claro  en el manejo de la convocatoria pública  realizada a finales del año pasado,  presionado el  director de tránsito amplió  2  días  la convocatoria de inscripciones. 
Por ejemplo:  los  taxistas  acusaron a Roncancio  de haber hecho el llamado a  última hora, por una emisora local y un 31 de diciembre, en una  fecha al extremo complicada, sin el tiempo suficiente de divulgación ni en el mejor momento,  de  tal forma  que la mayoría de ciudadanos se  hubieran informado oportunamente.  No obstante el Director de Tránsito alega que todo  se hizo con transparencia.
Finalmente se registraron 4990 aspirantes a solo 77 cupos de taxis. El  nudo empieza  a enredarse más porque  centenares de miles de taxistas están al extremo “machiros” con Roncancio. La desconfianza  es total. Incluso   en el gremio amarillo  se oyen voces de que el mismo Director de Transito de Yopal, por intermedio de terceros,  sería favorecido con varios cupos de taxis.  Esto, sumado a lo que dice la mayoría  de los postulantes: que  los cupos ya están decididos a dedo.  
Y que entonces  el sorteo final para cupos de matrículas de servicios de transporte público individual, tipo taxi  -que se hará a través de un medio electrónico el 30 de enero de 014, a partir de las 8:00 de la mañana  en un sitio público  amplio debido a la cantidad de personas que se inscribieron-  se convertiría en una física y pura farsa. Una payasada. Donde los payasos serían miles de taxistas. Claro: nadie denuncia formalmente con pruebas. Todo se resume a los dimes y diretes.
Si  todo  es honesto, correcto  y conforme  a lo que ordena la ley, al director Roncancio le digo: despeje  cualquier fisura de dudas sobre este proceso. No deje  que el  fantasma  de la desinformación y el chisme siga haciendo de las suyas. Haga  el sorteo en presencia del mismo Papa Francisco. Y que  sea él quien saque  las balotas ganadoras. Pero en este momento, el agua sucia  le està cayendo a usted todita.
Otro asunto  que tiene  a miles y  miles de ciudadanos de Yopal con los pelos de punta   son los taches, estorbos, trabas  o  como se le llame a  esos cauchos  con clavos de acero que la  Secretaria de Tránsito de Yopal ubico prácticamente en los cruces de todas las avenidas de la ciudad.
Estos  monstruosos “policías acostados” hacen extremadamente lenta  la movilidad en Yopal. Reconocemos  que la accidentalidad es alta. Pero con mecanismos tan represivos  y exagerados, no la vamos a solucionar. Hubieran podido ser menos  obstáculos de esos. Que entre otras cosas están causando daños mecánicos  a miles de vehículos, por los que el señor Roncancio no va a responder.
Y otro asuntico en que sigue fallando don Rofer es en   que  no hay en las calles suficientes  policías bachilleres para medio ordenar el pesado tráfico de la ciudad. Cruces tan claves    como el de la calle  novena   con marginal  de la selva,  o las  obras  de la ampliación de la vía  a Morichal,  o  el cruce  de la carrera  29 con  la vía  al Samán del Río,   son aterradores,.  En  esos  y otros  puntos críticos  son muchos  los accidentes  graves  que se presentan.
De la inoperancia de los semáforos y la pésima señalización, ni hablemos. 
Señor Rofer Roncancio: póngase  serio. Póngale  más  orden  y verraquera a su trabajo. Ese cargo que tiene -como todos los cargos públicos-  son para dejar reconocimientos a una labro en beneficio de la comunidad. No para vergüenzas. 
Digo yo.
Editorial Noticiero CASANARE AL DÍA 6- 8 A.M. Emisora Manantial Estéreo 107.7 FM.