En una primera acción, tropas de la Décima Octava Brigada desactivaron un artefacto explosivo que había sido instalado por miembros del frente 38 de las FARC en la vereda San Antonio del municipio de Tame.

El explosivo instalado a una distancia de 10 metros de la vía principal y a tres metros de una vivienda, estaba diseñado con una granada de mano y un dispositivo tipo trampa, con sistema de presión, con el cual se pretendía afectar a las tropas y la población civil que se encuentra en el sector. La operación evitó el estallido con el que se hubiera afectado y violado los derechos humanos y el derecho internacional humanitario de los pobladores de esta vereda.

De otro lado, tropas del Batallón de Ingenieros Rafael Navas Pardo en operaciones de control territorial, en la vereda Corocito del municipio de Tame incautaron 550 galones de gasolina, que eran transportados en un vehículo tipo camioneta marca Ford de placas WKAV-39 de nacionalidad venezolana. Dicho material fue puesto a disposición de la SIJIN de Tame.

Así mismo, tropas del Puesto Fluvial Avanzado No 42 de la Infantería de Marina, evitaron que 3 terroristas de ELN que se encontraban navegando en el rio Arauca en una canoa sobre el sitio la pesquera del municipio de Arauca, distribuyeran propaganda clandestina e intimidatoria a la población civil. En la acción de las tropas los terroristas abandonaron la canoa dejando una gran cantidad de propaganda alusiva al grupo terrorista denominado Omaira Montoya del ELN.

El Comando de la Octava División invitó a la población civil en general a rechazar de forma contundente mensajes intimidatorios y amenazas de grupos terroristas que buscan causar pánico en la comunidad atentando en contra del bienestar y los Derechos Humanos y de movilidad en el pie de monte llanero.

La Octava División ratificó en un comunicado que las tropas se encuentran comprometidas con la seguridad y la neutralización de la amenaza en los departamentos de Arauca, Casanare, Guania, Vichada y Norte de Boyacá.

El Ejército recordó que están a disposición de la población civil las líneas 146 y 147 de la red de Cooperantes, con el fin de denunciar cualquier acción que pueda atentar en contra de la tranquilidad y la seguridad de la región.