Leonardo Barón, director de la Unidad Departamental del Gestión del Riesgo, señaló que continúan atentos a la información que se genera en los cuatro puntos de monitoreo del represamiento del río Upía, en la vereda Aguas Calientes de Sabanalarga.

“Como ya hemos venido hablando, el represamiento se originó aproximadamente hace ocho meses y a pesar de que no se puede hacer ninguna intervención con ingeniería u obras, ya se han tomado las medidas necesarias, se han instalado alertas tempranas y los Comités de Gestión del Riesgo de cada Municipio han capacitado a las familias ribereñas para que sepan cómo actuar en caso de que llegue a presentarse una avalancha”, explicó.

Según Barón, son cuatro puntos de monitoreo, uno está aguas arriba del represamiento, otro en el represamiento, uno más, aguas abajo y otro en el centro poblado El Secreto, desde allí se envían constantes boletines sobre cómo se encuentra el represamiento y, en caso de requerirse, se informaría sobre la necesidad de iniciar evacuación.

“No debemos bajar la guardia y continuar con el monitoreo como se viene haciendo, pero no se ha presentado ningún movimiento o indicador que nos diga que va a presentarse una avalancha; sin embargo, los puntos de monitoreo, en caso de presentarse alguna emergencia o se suban muchos los niveles, nos permitirán actuar a tiempo para salvaguardar las vidas de los habitantes de la zona”, manifestó.

El director de la Unidad Departamental de Gestión del Riesgos confirmó que hace 15 días se hizo una evacuación preventiva, porque subió mucho el nivel pero como no se presentó ninguna emergencia, se regresó a la normalidad; “eso demuestra que los organismos de socorro, los comités municipales y el departamental estamos preparados y alertas para evitar una tragedia”, añadió.

Recordó que, inicialmente, habían enviado maquinaria de la oficina de Gestión del Riesgo, para la construcción de unos jarillones en el centro poblado El Secreto, pero debido a las altas crecientes que ha presentado el río, la obra no ha sido posible, por lo que junto a los municipios involucrados Sabanalarga, San Luis de Gaceno y Villanueva, se tomó la decisión de suspender la construcción mientras el río les permite volver.