En una mesa de trabajo adelantada por la Asamblea Departamental con la presencia de la Secretaría de Educación de Casanare, los transportadores de rutas escolares en las instituciones educativas oficiales y la interventoría se dieron a conocer las falencias que se registran con el contratista por el no pago de servicios a los conductores, azafatas y dueños de buses.
Situación que, para la Diputada Sonia Bernal, no es nueva, ya que los esfuerzos del Departamento en garantizar el acceso a la educación de los niños se ven reducidos por la falta de una mayor vigilancia por parte de la interventoría en la ejecución de los contratos.
“Exigimos a la Secretaría de Educación mayor supervisión al contrato de transporte escolar de los estudiantes, que hoy sin ninguna responsabilidad faltan al pago de salarios de conductores y azafatas. ¡Y lo peor! No garantizan un transporte seguro que cuide la vida de los niños y niñas”, afirmó Sonia Bernal.
La gran mayoría de los buses que están prestando el servicio de transporte escolar en Casanare, no están contratados; situación que pone en evidente peligro la integridad de los niños, niñas y jóvenes estudiantes.
El contrato que asciende a los $24 mil millones y que está en su etapa de terminación, está siendo ejecutado por una Unión Temporal, integrada por seis empresas reconocidas en la región, como Coflonorte, Coomulllanos, Cootrallanero, Coromoto, JR y Galaxia; “sin embargo, no responden al músculo financiero y a la responsabilidad que exige el servicio”, aseguró la dirigente casanareña.
Finalmente, la Diputada se mostró preocupada por la integridad de los estudiantes y pidió a las empresas hacer lo propio para dar solución al pago de salarios a los trabajadores y prestadores de servicio, que dependen económicamente de esta actividad para llevar el sustento a las familias.