El alcalde de Maní, Ferney Chaparro Perdomo, hizo un llamado urgente a las autoridades nacionales para atender la situación de 49 familias, conformadas por 169 personas, que han llegado al municipio desde el departamento del Cesar tras ser víctimas del conflicto armado.

Según el mandatario, estas personas se asentaron de manera imprevista en la finca Versalles, en la vereda El Amparo, sin previo conocimiento de la administración municipal. Además, destacó que esta llegada masiva se da en un contexto de riesgo señalado en la Alerta Temprana 016-2024 de la Defensoría del Pueblo, la cual advierte sobre amenazas a la vida y seguridad de líderes sociales en la región. 

Chaparro solicitó la intervención inmediata de entidades como la Agencia Nacional de Tierras (ANT), la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, la Procuraduría, la Contraloría, la Gobernación de Casanare y otras instituciones para establecer un diálogo y garantizar un proceso adecuado para la atención de estas familias.

El Coronel Daniel Lozano, del Comando del Departamento de Policía Casanare, informó que la Defensoría del Pueblo ya hace presencia en el lugar, así como la Oficina de Derechos Humanos y las Unidades de intervención en materia de salud, protección, infancia y adolescencia para verificar las condiciones.

Según lo manifestado desde la Administración Municipal de Maní, no estaban preparados, lo que dificulta la atención adecuada a las necesidades básicas de los desplazados incluyendo, alojamiento, alimentación y atención médica, entre otras.