Por Juan Eduardo Duran Duran*

Una epidemia se define como el aumento del número de casos de una enfermedad con respecto a lo esperado. Así de simple. Si se espera 10 casos de una enfermedad en una semana y de un momento a otro pasan a 30, se considera una epidemia.

El poder determinar el aumento en el número de casos se hace mediante la VIGILANCIA EPIDEMIOLOGICA, que es una acción de responsabilidad en el caso de Yopal de la Secretaría de Salud del Municipio.

Existen enfermedades y eventos de Notificación Obligatoria, determinadas por la ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD, que en Colombia son algo así como 47, entre ellas: Paludismo, chagas, dengue, sarampión, rubéola, rabia, VIH - SIDA, tuberculosis, Tétano, fiebre amarilla, ENFERMEDAD DIARREICA AGUDA, caso que nos atañe y que sirven para tomar medidas urgentes de control y prevención.

Más de 1500 casos de Diarrea presentados en dos semanas en Yopal, obligaron a que sus autoridades declararan como Epidemia.

Hasta ahí, podríamos decir que todo estaba en la lógica del actuar de las autoridades. Pero lo que se salió de la lógica es que el secretario de Salud del Municipio EDWIN BARRERA saliera a manifestar a los ciudadanos que la diarrea podría estar siendo ocasionada por EL AIRE, o por LOS ALIMENTOS y desestimó las opiniones que muchos dábamos sobre la total seguridad que el líquido que da vida, pero que también mata, era el responsable: EL AGUA.

Veedurías ciudadanas como la iniciada por el abogado FELIPE CANO, acciones valerosas como la realizada por el profesor SERVANDO GONZALEZ, rector del ITEY quien se atrevió a tomar muestras de agua que envió a un laboratorio y dieron positivas (a bacterias y no a virus como los detectados por el Instituto Nacional de Salud) y acciones de tantos y tantos ciudadanos que manifestaron la preocupación de que el agua fuera la responsable. Estas voces fueron acalladas y maltratadas acusándolas de mentir o querer crear confusiones.

A medida que pasaban los días y los casos de diarrea aumentaban, crecía también la creencia de que el agua era la responsable, pero crecía también la posición cerrada de los administradores de salud y de la empresa de Acueducto negando ésta posibilidad e inculpando al aire y desviando la atención hacia expendios de empanadas, refrescos o golosinas como los causantes.

Hoy 1ro de marzo, el INSTITUTO NACIONAL DE SALUD, máxima autoridad sanitaria de Colombia, da su dictamen, fuerte, conciso y preciso: DE ACUERDO CON LOS HALLAZGOS ENCONTRADOS SE CONFIRMA QUE LA SITUACION EPIDEMICA DE ENFERMEDAD DIARREA AGUDA EN EL AREA URBANA DE YOPAL SE ORIGINO POR AGENTES INFECCIOSOS, EVIDENCIANDO QUE EL VEHICULO TRANSMISOR FUE EL AGUA…sentencia que confirma la sospecha de miles de yopaleños.

El agente infeccioso responsable es un virus llamado ROTAVIRUS, el rotavirus se transmite FECAL-ORAL, es decir, que se encuentra en las heces y es casi exclusivo humano. Esto quiere decir, que los habitantes de Yopal hemos venido tomando agua contaminada con heces humanas y que el sistema de potabilización que se usa no es bueno, que el medio de suministro de agua, por tubería o carrotanques tampoco es bueno, por ser fuentes potenciales de contaminación.

Esta situación nos deja las siguientes reflexiones:

1. Responsabilidad de las autoridades sanitarias: las autoridades sanitarias deben realizar permanentemente estudios sobre la calidad del agua, un estudio para detectar el ROTAVIRUS no es fácil, pero se pueden realizar monitoreos. El agua puede contaminarse en varios puntos del sistema de conducción incluyendo los puntos donde la gente se abastece.

2. La prepotencia y la arrogancia de los funcionarios puede llevar a ocultar la verdad o desviar la atención sobre las causas, como sucedió en esta lamentable situación.

3. La administración municipal debe aceptar su incapacidad para solucionar el problema y permitir la ayuda de entidades y entes del orden nacional.

4. Hoy más que nunca, se necesita de una comunidad dispuesta a colaborar más por su salud, pero se necesita a una comunidad dispuesta a movilizarse en pro de su salud.

En una sociedad donde los funcionarios públicos están al servicio de sus ciudadanos, donde existe la responsabilidad, la equidad, la autocrítica y el sentido del compromiso social, cuando se actúa con negligencia, arrogancia y maltratando a su pueblo, solo queda la solicitud de PERDÓN PUBLICO y retiro del cargo para que la dignidad vuelva a esa persona. Los yopaleños esperamos que así lo hagan quienes actuaron de esa forma con Yopal.

Alcalde, es hora de corregir el rumbo, es hora de enderezar muchas cosas de su administración. Quienes creímos en su propuesta con SENTIDO SOCIAL nos sentimos frustrados pues no vemos sentido social en los actos de gobierno.

Rectificar y enderezar el rumbo, no es sinónimo de derrota, es la actitud de los GRANDES HOMBRES y estoy seguro que su pueblo se sentirá tranquilo de caminar junto a usted en busca de las grandes soluciones que clama.

NOTA: ¿qué pasará con los efectos que a largo plazo puede causar el sistema de potabilización que se está llevando a cabo, con la acumulación de sedimentos inorgánicos y con elementos orgánicos, que estudios en todo el mundo han puesto en alerta en situaciones similares, como causantes de enfermedades crónicas?

*JUAN EDUARDO DURAN DURAN – MEDICO