No paran las polémicas actuaciones de la gerencia del Hospital Regional de la Orinoquia. Mientras hace pocos días se ordenó la restricción de ingreso de alimentos y bebidas al Centro Asistencial, esta semana se permitió el montaje de un establo en el sótano de la Institución, frente al área del programa Madre canguro, a donde son llevados los bebés prematuros por parte de sus madres gestantes recién salidas de sus partos.

Dentro de los animales había cerdos, patos, conejos, un caballo, cabras y hasta un burro. El tema fue duramente cuestionado tanto por algunos funcionarios, como por Víctor Hugo Tamayo, quien hace parte de la Asociación de Usuarios del Hospital Regional de la Orinoquía ESE.

Tamayo señalo que todas las zonas de cualquier Hospital deben propender por mantener los altos estándares de asepsia, limpieza y cuidados, debido a las diferentes complejidades de los pacientes.

Por su parte, algunos funcionarios que laboran en esa área, dijeron no estar de acuerdo por los olores que expelían los animales, mientras que algunos usuarios mostraron su desconcierto.

El médico Darío Santacoloma, promotor de la actividad, justificó el evento por la celebración del día del medio ambiente y argumentó que Casanare es un Departamento netamente agropecuario, acostumbrado a los animales y de conservarlos adecuadamente, dijo que las secreciones no generan daño, además de que en el primero piso no hay hospitalización.

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