Por Leonardo Puentes.*
Que los gobernantes del departamento de Casanare sean destituíos o condenados por corrupción es lo normal. Pero que en el mismo período constitucional el gobernador y el Alcalde de su capital sean destituidos es un hecho que no tiene antecedentes en todo el país.
Estos antecedentes y lo del Alcalde Celemín debe llamarnos a la reflexión. Este no puede seguir siendo un asunto CONSENTIDO por nuestra SOCIEDAD sin que aquí pase algo: El daño que se le ha causado a Casanare y particularmente a Yopal con el desastre administrativo del Alcalde Celemín es un asunto que no debiera repetirse nunca jamás.
Explicaciones hay de todo tipo, todas con algo de validez: el delirio causado por la bonanza petrolera; la falta de arraigo y sentido de pertenencia ocasionada por el crecimiento súbito de la población; la influencia de dineros ilícitos en las campañas políticas; la cultura seudo traqueta que contamina toda nuestra sociedad, etc. Lo que no se entiende es cómo personas de prestantes familias con ancestros llaneros, aunque no todas, hayan llevado a nuestras instituciones a semejante tragedia.
Y yo agregaría una más: NO TENEMOS PERSONAS CON CLAROS CONCEPTOS ÉTICOS Y FILOSOFÍA DE ESTADO, FORMADAS PARA GOBERNAR. Y a su vez la sociedad, mayoritariamente vulnerable por sus condiciones de pobreza, facilita el camino a la corrupción, que aprovecha para manosearla una y otra vez. Por eso el ciclo se repite y la gente, usando el SENTIDO COMUN, negocia antes de, porque sabe que lo más probable es que nada cambie.
La obligación que nos asiste hoy es pasar esta página de desaciertos y confusión que todos hemos ayudado a escribir y consentido en alguna medida. Levantar la cabeza y mirar al futuro con optimismo para abrirle paso a una nueva etapa de nuestra historia política, libre del fantasma y los voraces tentáculos de la corrupción.
POSDATA 1: Entre tanto, después de #1344DíasSinAguaPOTABLE y si calculamos que por cada uno de los 30.013 contadores de agua de Yopal, es decir familias o inmuebles, se inviertan $3.000 pesos diarios para acceder a Agua POTABLE (representados en bolsas, botellones, carrotanques, desplazamientos a los puntos de distribución, etc.); es decir, que cada yopaleño se gaste algo así como $600 pesos diarios adicionales a la factura, habremos pagado hoy la nada despreciable suma de $118.851 MILLONES de pesos, directamente de nuestro bolsillo! Las cuentas de la tragedia que nadie hace.
POSDATA 2: Y si a esto le sumamos los costos de la factura durante 44 meses; de la nueva PTAP, incluidos sus estudios y la compra de los terrenos; de los pozos profundos; de la colapsada Planta Modular de la Vega; del denigrante “Plan de Contingencia” de cuatro años con carrotanques, etc., la cuenta supera ya los $300.000 MILLONES de pesos. Quiere decir esto que hoy ya hemos pagado más de cuatro (4) veces el acueducto, el equivalente a cerca de cuatro (4) años de recursos propios del municipio. Costos colaterales de una muy mala elección.
*Concejal de Yopal