El comandante del Departamento de Policía de Casanare, coronel Giovanny Barrero, entregó un panorama de los grupos delincuenciales que afectan la seguridad en el oriente colombiano y que tienen incidencia en este departamento.
El oficial señaló que Casanare, por su ubicación estratégica, se convierte en un territorio de tránsito y presión por parte de diferentes estructuras armadas ilegales. “Tenemos que saber que en Arauca hay una marcada presencia del ELN, y en la zona denominada ABC (Arauca, Boyacá y Casanare) operan dos grupos disidentes de las Farc y una facción del ELN que mantienen combates en esos puntos. Nosotros somos parte de ese tránsito de estas estructuras al margen de la ley”, explicó.
Barrero agregó que en el sur del departamento también se reporta la presencia del Clan del Golfo, mientras que recientemente se ha identificado la influencia de migrantes irregulares que, según el oficial, han protagonizado algunos hechos que alteran la seguridad en el territorio.
El comandante advirtió que, de acuerdo con las labores de inteligencia, no se puede descartar que estas dinámicas tengan repercusiones directas en municipios de Casanare. Además, alertó sobre un escenario nacional cada vez más complejo en el que los grupos criminales buscan ganar poder político y presionar al Gobierno en el marco de eventuales procesos de negociación.
“Desafortunadamente Colombia está entrando en una época muy compleja, donde estos grupos, en una carrera también política, van a hacer presión al Gobierno y a los futuros candidatos presidenciales”, informó Barrero.